
Un día de otoño paseando por un hayedo en las faldas del Amboto además de disfrutar con el paseo y el maravilloso paisaje puedes verte inmerso en un misterioso mundo de leyenda. No vimos a la Dama del Amboto pero … ¿nos envío un duendecillo a vigilarnos?…
No hay comentarios:
Publicar un comentario